martes, agosto 28, 2007

Mentiras nada más

Mentiste. Mentiste en esto, como en tantas otras cosas. Jamás tatuaste mi nombre en tu corazón. ¡Jamás! Ni en la aorta, ni la carótida, en el ventrículo izquierdo o el derecho, ni en las aurículas ni en ninguna de las fibras musculares de esa maldita víscera cardiaca tuya que hoy he viviseccionado. ¡MENTIROSO!