miércoles, noviembre 22, 2006

Si no puedes vivir sin mi...

-No puedo vivir sin tí.
Su voz repite, como cada día, la misma frase a través del auricular. Y, como cada día, ella cuelga sin decir nada. ¿Qué más queda por decir? Ella lo sabe perfectamente, después de todo, lo vió pegarse un tiro en la sien cuando le anunció que le dejaba.