domingo, enero 13, 2008

Un pequeño hueco

¡Vamos, oficial, no ponga esa cara! La cosa es muy sencilla de entender. Ella repetía una y otra vez que no le cabía eso en la cabeza, --le digo mientras forcejea con las ataduras-- así que le hice el favor de hacerle un pequeño hueco. ¿Necesita quizás un poco de ayuda? --Y sonrío solícito mientras tomo de nuevo el cincel y el martillo.