Adeudo
De acuerdo, hablemos de deudas.Me debes los sueños, las promesas y las noches rotas. Me debes la paz, la sonrisa y la esperanza robadas. Me debes la sangre, las lágrimas y el sudor vertido. Me debes las noches vacías, los abrazos anhelados. Me debes un beso de ajenjo de tu amarga boca.
Así que, una vez hecho el recuento, me parece que bien puedo quedarte a deber una explicación.